Me atraganté con un trozo de melón y rapidamente bebia jugo, sentí que la sangre me subía a la cabeza y por si las dudas aparté un poco mas mi silla de la de Andres y miré el mantel de la mesa que de pronto sus decorados plateados eran los mas bonitos...
-No... nosotros no salimos-le explique cohibida-somos... hermanos-despues de todos asi lo éramos en nuestra pequeña farsa.- nos conocemos desde la infancia... es mi detestable vecino.
Solté una risilla y le pasé un brazo por los hombros a Andrés al mismo tiempo que le revolvía el cabello con la otra mano.